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Historia contemporánea

BAJOARAGONESES EN LA OPERACIÓN RECONQUISTA DE ESPAÑA

Publicado en Historias del Bajo Aragón en octubre de 2013

La Operación Reconquista de España es un episodio muy poco conocido de nuestra historia reciente. Sin embargo, la invasión del valle de Arán a finales de 1944 inquietó seriamente al Caudillo por Dios y por España.  La Agrupación de Guerrilleros de la Unión Nacional Española (UNE) había concebido perfectamente el plan de operaciones. Estaban convencidos: si conseguían tomar el valle, los aliados ayudarían a los republicanos. Era el momento de cambiar la Historia de España. Eso mismo pensaron el puñado de bajoaragoneses que participaron en la única operación militar de envergadura contra el gobierno franquista en sus cuatro décadas de historia.

El 19 de octubre de 1944 miles de entusiastas guerrilleros penetran en el interior de España. El plan orquestado por Jesús Monzón, líder de la UNE y artífice de la reconstrucción del PC en Francia, se iniciaba a las seis de la mañana mediante el cruce fronterizo del grueso de los guerrilleros españoles. Unos 3.500 hombres distribuidos en brigadas acceden al interior de España solamente por el valle de Arán mientras otros grupos armados lo hacen por diversos puntos de la geografía pirenaica (unos 7.000 hombres componen el total del operativo).

Vicente López Tovar, jefe militar del operativo de Arán

Semanas antes, tras el desalojo de las tropas alemanas del sur del país galo, miles de guerrilleros españoles que en su mayoría todavía formaban parte de las FFI, habían atendido a las proclamas de la UNE que pretendía derrocar al Gobierno español mediante una operación armada. El operativo consistía en tomar el valle de Arán estableciendo en él una cabeza de puente, proclamar la República y formar un gobierno provisional, de manera que los aliados volvieran la mirada hacia el Pirineo. Se soñaba con una intervención del mando interaliado que no podía abandonar a su suerte a quienes tanto habían luchado por la liberación de Francia. 

No era la primera vez que hombres armados procedentes del otro lado de los Pirineos entraban en el país: en 1943 habían se habían avistado pequeños grupos de maquis internándose en España; su misión era contactar con partidas de guerrilleros huidos (cuyo origen se remonta a la Guerra Civil) del noroeste de la Península, y con grupos antifranquistas de distintas regiones. Así llegaron los primeros grupos de maquis al Maestrazgo turolense.

Pero la llegada masiva de maquisards españoles se produjo a partir del verano de 1944, cuando varias unidades guerrilleras volvieron a la tierra que les vio nacer por varios puntos del Pirineo. En Aragón, La Brigada B se internó por el Paso de la Vieja, en las cercanías de Canfranc; la Brigada X hizo lo propio por el valle de Pineta; por su parte, la 21 Brigada, de la que formaron parte al menos seis bajoaragoneses, actuó por el valle de Benasque. El autor de estos párrafos se encuentra inmerso en una investigación que pretende revelar tanto la identidad de los seis, como algunos datos en torno a su paso por la Resistànce en Francia. En el momento en el que se redactan estas líneas puede darse por segura la presencia en la 21 Brigada del calandino Martín Vidal y del caspolino Elías Piquer; este último encontró la muerte en un enfrentamiento con las tropas del Gobierno el 13 de octubre de 1944.

Carné de combatiente del calandino Martín Vidal

Como decíamos, el contingente principal de los guerrilleros cruzó a España por el  valle de Arán. Y no por casualidad. El valle que tiene por capital Vielha, solía quedarse incomunicado durante el invierno (el túnel de Vielha se encontraba todavía en construcción) y acceder a él era menos complicado desde Francia que desde la vertiente española.

A pesar de que las fuerzas del Gobierno contaban con informaciones en torno a las intenciones de la UNE, los preparativos previos destinados a contrarrestar la invasión guerrillera fueron insuficientes. Así, las tropas comandadas por Vicente López Tovar lograron un notable éxito durante las primeras horas; unos 1.500 hombres equipados con fusiles y armas automáticas, algunos cañones y morteros, conquistan las poblaciones de Bausén, Caneján, Pursingles, Pradel, Les, Portillón, Bossots, Arrés, La Bordeta, Arró, Vilamós, Vegós, Es Bordes, Aubert, Bellau, Benós, Arrós i Vila, Montcorbau, Mont y Vilach. El cuartel general se establece en la localidad de Bosots.

Bosots, cuartel general de la 204 División en octubre de 1944

Sin embargo, algunas villas, convenientemente reforzadas, lograron contener el ataque guerrillero. En una de ellas, Es Bordes, Pablo Ulldemolins Andreu, natural de La Fresneda, se dejó la vida.

Pablo Ulldemolins había nacido el 12 de junio de 1923. Hijo de José y Antonia, había dejado la calle Eras de su villa natal al ser llamado a filas. No sabemos en qué momento llegó al Pirineo, aunque es probable que formara parte de alguno de los regimientos trasladados hacia las montañas para reforzar el dispositivo de defensa ante la creciente actividad guerrillera. Las fuentes consultadas aseguran que unas semanas antes de su muerte fue capturado por maquis españoles y que posteriormente había decidido unirse a ellos. Combatiendo a las tropas regulares gubernamentales del 2º Batallón Albuera, falleció el 19 de octubre de 1944.

La operación avanzó hasta que el objetivo principal, Viella, estuvo a tiro. Pero en ese momento los jefes guerrilleros encargados del asalto final, manejando informaciones erróneas en cuanto a las fuerzas a las que iban a enfrentarse, no se decidieron.

El guerrillero José Sádaba durante su exilio en Francia

Al mismo tiempo, las brigadas que actuaban por los flancos, tanto por el derecho como por el izquierdo, fracasaron en sus objetivos. En el lugar conocido como Esterri d’Aneu actuaron el caspolino José Sádaba y el alcañizano José Zaurín como miembros de la Brigada 471. Habían recorrido una distancia demasiado larga, no tenían provisiones y los grupos enviados como avanzadilla no volvían. Por si fuera poco, se esperaba que el tiempo empeorase todavía más, por lo que decidieron darse media vuelta antes de lo previsto. A su llegada a Francia el comandante Álvarez, jefe de la 471, fue visitado en Aulus por sus superiores llegados desde el cuartel general de Montrejeau. Querían que volviera a España y, ante la negativa de Álvarez, sus propios hombres firmaron un documento apoyaban la decisión de su jefe.

Esfumado el factor sorpresa, el operativo se complicó en los siguientes días por motivos mucho más importantes que la meteorología. De manera exponencial, las tropas gubernamentales fueron considerablemente reforzadas, llegando a alcanzar la cifra de 100.000 hombres entre Policía Armada, Guardia Civil, y tropas regulares.

Las fuerzas de ambos contendientes permanecieron prácticamente estabilizadas entre los días 21 y 25. Pero a partir del día 26, cuando los refuerzos del Gobierno habían crecido de manera significativa, se iniciaron los contraataques. La artillería, que había llegado a Vielha salvando enormes dificultades de transporte, inició la ofensiva artillera que dejó paso al barrido de los montes araneses por parte de varias compañías de infantería. Para entonces, la retirada guerrillera ya estaba cantada.

Durante los estertores de la operación entró en escena otro bajoaragonés, el caspolino Camilo Ballovar, miembro del  Servicio de Información y “hombre de confianza” de Joan Blázquez, general César, uno de los altos cargos del operativo que ocupaba el puesto de comisario general del Estado Mayor y jefe del Servicio de Información y Contraespionaje de la 204 División. Camilo volvería de nuevo a España a finales de 1945, siendo detenido en Colungo (Huesca), en enero de 1946 tras una refriega con la Guardia Civil.

Foix, Francia

Finalmente, el día 27 de octubre la mayor parte de las fuerzas guerrilleras volvieron a cruzar la frontera francesa dejando atrás varias decenas de muertos. A la vez, algunos grupos de maquis quedaron aislados. Muchos de ellos serían capturados y darían con sus huesos en prisiones como la Modelo de Barcelona o la Prisión Provincial de Torrero.

Heraldo de Aragón, en su edición del sábado 28 de octubre de 1944, tituló

“Las tituladas Fuerzas Republicanas Españolas se retiran a unos 20 kilómetros al norte de la frontera”

Tres días después, El Noticiero zaragozano daba cuenta de las palabras del general Ricardo Marzo

“El último rojo español ha repasado de nuevo la frontera con Francia”

A pesar de que la incursión principal había fracasado, las incursiones guerrilleras continuarían produciéndose durante meses. Otros dos bajoaragoneses cumplieron con su cometido y entraron en acción varias semanas después: el cabo Agustín Llop, y el capitán Francisco Camarasa, ambos hijos de Fabara, penetraron en el país formando parte de la 101 Brigada. Detenidos a principios de 1945, fueron juzgados junto al resto de sus compañeros. No hubo piedad para el capitán Camarasa. El 12 de junio de 1945 fue asesinado en las tapias del Cementerio de Torrero.

El fracaso de Reconquista de España significó el final político de Monzón y el ocaso definitivo para la UNE. Comenzaba el ascenso de Santiago Carrillo y los estalinistas del Buró Político.

 Franco, bajo un contexto internacional nada favorable para el Régimen, con algunos de sus grandes partidarios apostando por la salida monárquica, había logrado salvar su cabeza.

El alcañizano José Zaurín Gracia residía en Barcelona en 1993. En ese año, en Montjuit, fue condecorado por su papel en la Resistencia.

El calandino Martín Vidal rechazó la Cruz de Guerra con estrella de plata concedida por su participación en el maquis del departamento del Gard durante la Segunda Guerra Mundial.

Para Piquer, Ulldemolins, Ballovar, Sádaba, LLop, Camarasa y tantos otros, solo hubo olvido.

Amadeo Barceló

Fuentes:

Arasa, Daniel: La invasión de los Maquis – El intento armado para derribar el franquismo, Arcos Bergara, 2004

Azcárate, Manuel: Derrotas y esperanzas, La República, la Guerra Civil y la Resistencia, Tusquets Editores, 1994

Martínez Baños, Fernando: Hasta su total aniquilación. El Ejército contra el Maquis en el Valle de Aran y el Altoaragón, 1944-1946, Almena Ediciones, 2002

Sánchez Agustí, Ferrán: Maquis y Pirineos, Milenio, 2001

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Heraldo de Aragón,  edición del sábado 28 de octubre de 1944, portada.

El Noticiero, edición del martes 31 de octubre, portada.

 Registro de nacimientos del Ayuntamiento de La Fresneda, libro del año 1923, folio 28.

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